Hola, ¿Cómo están?
Hoy les traigo un fragmento pequeño. esperó que sea de su agrado. Sabrán más sobre Luke y Anazareth,
Capítulo 6
Anazareth no se movió. Odiaba la oscuridad. Luke con su magia hizo una pequeña bola de luz.
— Gracias.
Anazareth camino lento y seguía temblando . A Luke se le ocurrió una idea.
— Avanzaremos más rápido si jugamos a una pregunta.
Anazareth le miró confundida y algo enojada. Ese no era el momento para jugar.
— ¿ Qué? disculpa no te entiendo.
— Que juguemos. Yo te hago una pregunta en la que no puedes mentir y tú me haces una pregunta y así.
Anazareth lo miró como si estuviera loco e indignada le contestó. — No estoy para juegos.
— Cobarde.
Anazareth pensó en volver a transformar a Luke en gallina. Pero no lo hizo en lugar de eso le dijo de mal humor. — ¿Si digo que no vas a seguir dando lata con esto?
— ¿Eso es una pregunta?
Anazareth puso los ojos en blanco —. Sí. Contesta.
— Sí.
— Juguemos y salgamos de este horrible lugar.
— Eso, es una buena idea, no te arrepentirás.
— Ya estoy arrepentida.
Luke se rio y Anazareth se estremeció y se preguntó ¿ Por qué diablos jugaba y por qué Luke era tan guapo cuando se reía?
— Pregunta lo que desees Luke.
— ¿ Por qué le temes a la oscuridad?
Anazareth se detuvo abruptamente y casi hace que Luke se caiga al suelo.
— No es algo que me guste contar. Nadie lo sabe.
Luke siguió caminando antes de decir —. Lo que me digas será solo entre los dos. Pero no te obligaré a hacer algo que no deseas. El juego se cancela. Solo... —. Luke se calló y siguió caminando.
Anazareth lo siguió y tocó su hombro. — ¿ Solo que?
— ¿ Seguimos con las preguntas?
Anazareth levantó la ceja entre molesta y curiosa.
— ¿ Solo que contesta?
— Guardar las cosas hace que se vuelvan una carga muy pesada.
— Es algo que decía mi abuelo.
— Lo sé. Tenía razón.
Caminaron por un buen rato sin decir nada. Luke pensó que las cosas iban a quedar así. Él estaba muy preocupado por Anazareth pero si quería ser su amigo o algo más ella debía confiar en él.
Estaba feliz sin ningún compromiso. Sin embargo, pensaba mucho en Anazareth Solo le había besado una vez, pero deseaba hacerlo de nuevo. Necesitaba tenerla en sus brazos y cuidarla.
Anazareth sabía que lo mejor era callar aunque no lo hizo.
— Odio hablar de ello. Ni siquiera sé qué edad tenía la primera vez que pasó. Ahora estoy divagando.
Luke no le interrumpió. Anazareth agradeció eso aunque la miraba como si pudiera leer su alma.
— Lo que quiero decir es que Azidahaka me entero viva, era uno de sus horribles juegos. Yo tenía 5 o 6 años.
Luke no supo qué decir. Lo único que deseaba era borrar la tristeza en el rostro de Anazareth. Y bueno también golpear a Azidahaka.
Anazareth ni siquiera miró a Luke camino lo más rápido posible. Esperaba no llorar ni que él sintiera lástima por ella. Estuvieron mucho tiempo sin hablar.
Se podía sentir la tensión en el ambiente. Anazareth odiaba el silencio y se sentía culpable por contarle a Luke sobre Azidahaka. Estaba segura de que ahora Luke nunca más se interesaría por ella. Debía estar tranquila y hasta contenta de eso, pero no era así.
— Ahora me toca preguntarte a ti cualquier cosa.
Luke en voz baja contestó —. Si ¿Qué deseas saber?
Anazareth pensó que era una mala idea desde que pronunció esas palabras. — ¿ Por qué me besaste?
Luke se acercó sorpresivamente a Anazareth — Mírame a los ojos.
Anazareth se quedó hipnotizada por un momento mirando a Luke a los ojos. Luego de unos segundo o unos milenios Anazareth no lo sabía el vampiro dijo en voz baja —. Me gustas. Pero deseo besarte de nuevo y conocerte mejor. Es así de simple.
Minutos después acarició el rostro asustado de Anazareth.
—Pero.
— Pero nada, me gustas a pesar de todo lo que has sufrido y no me has contado. Me gustas con tu mal humor y con tu dulzura.
Anazareth con incredulidad dijo — . No quiero tu lastima.
— No te tengo lastima. Eres demasiado fuerte para que te tenga lastima. A pesar de la oscuridad y de tu miedo aun sigues de pie caminando.
Anazareth y Luke se miraron unos minutos sin decir nada iban a besarse. Pero Anazareth tuvo miedo y empezó a caminar.
— Creo que pronto encontraremos una salida.
Luke algo molesto dijo —. Si ¿ por qué no seguimos jugando?
A Anazareth no le gustaba la idea. Aunque solo alzo los hombros como respuesta. Estaba convencida que Luke le iba a preguntar si le gustaba o alguna cosa parecida. Y ella aunque le gustara le iba a decir que no y las cosas volverían a la normalidad. Ellos sólo serían meros conocidos.
— ¿ Quién era el hombre que perseguimos?
— No lo sé.
— Pensé que no ibas a mentirnos.
Anazareth molesta para y encaró a Luke —. No te miento. No sé quién era, pero cuando realizaba el hechizo del agua eterna. Miles de recuerdos se agolparon en mi mente. En uno de esos recuerdos se encontraba ese hombre. Estás satisfecho.
Luke suspiró antes de contestar —. Sí.
— Eres tan odioso.
— Lo sé.
Anazareth quiso golpearlo al ver su mirada presuntuosa.
— ¿ Qué pasó cuando hiciste el primer hechizo de agua eterna?
— Una pregunta por turno.
Luke gruñó — Pregunta.
— ¿Todavía estás enamorado de Emma?
Luke casi se ahoga . Empezó a toser fuertemente. Anazareth murmuró despechada —. Machos.
Fue cuando sintió un olor dulzón que la hizo sentir mareada y con sueño provenía de la cueva de la izquierda.
Les deseo un genial fin de semana.